Disculpen, es que tengo un pequeño problema, por eso no escribo. (Estoy completamente bloqueado)
viernes, 23 de enero de 2009
jueves, 15 de enero de 2009
Dilección
Adoro lo indeciso: rumor, tintes brumales:
lo que tiembla y ondula, lo que se tornasola;
agua, ojos, cabellos; seda, follaje, ola,
y el ingrávido ritmo de las formas juncales.
El humo que al ensueño presta sus espirales;
del nido los arrullos que el silencio acrisola;
la noche confidente que su perfil inmola,
y la sabia dulzura de sus manos astrales.
Y las horas sin término de una lenta caricia;
y el alma que se agobia con su propia delicia
como rosa que muere vertiendo su nectario.
Alma de casta sombra que mudamente clama,
donde, como el rubí de la votiva llama,
un amor arde insomne, místico y solitario.
Albert Samain.
...insomne, místico y solitario...
lo que tiembla y ondula, lo que se tornasola;
agua, ojos, cabellos; seda, follaje, ola,
y el ingrávido ritmo de las formas juncales.
El humo que al ensueño presta sus espirales;
del nido los arrullos que el silencio acrisola;
la noche confidente que su perfil inmola,
y la sabia dulzura de sus manos astrales.
Y las horas sin término de una lenta caricia;
y el alma que se agobia con su propia delicia
como rosa que muere vertiendo su nectario.
Alma de casta sombra que mudamente clama,
donde, como el rubí de la votiva llama,
un amor arde insomne, místico y solitario.
Albert Samain.
...insomne, místico y solitario...
miércoles, 14 de enero de 2009
¿Qué es lo normal?
Según los diccionarios:
NORMAL: Dícese de lo que se halla en su natural estado. Dícese de lo que por su naturaleza, forma o magnitud se ajusta a ciertas normas fijadas de antemano.
Creo que casi todos entendemos lo normal como lo habitual, lo más común o lo más aceptado por los que forman parte del ambiente en el que vives, de tu ciudad y tu cultura.
Pero no esta bien, creo que hay que definir conceptos, por ejemplo, ¿Cuál es el estado "natural"? (que indica el concepto arriba mencionado) ¿Lo normal es lo común? ¿Qué define lo común?, ¿Qué es común?, y si ese concepto de lo normal de los diccionarios ¿Se refiere a cosas o a personas?
No me parece que lo común sea lo mas normal, tengo esperanzas en que lo mas normal sea ser uno mismo, pero ¿Cuál es el límite entre lo normal y lo anormal? y ¿Hasta dónde es posible ser normal?
Joder, me siento mas anormal que nunca...
NORMAL: Dícese de lo que se halla en su natural estado. Dícese de lo que por su naturaleza, forma o magnitud se ajusta a ciertas normas fijadas de antemano.
Creo que casi todos entendemos lo normal como lo habitual, lo más común o lo más aceptado por los que forman parte del ambiente en el que vives, de tu ciudad y tu cultura.
Pero no esta bien, creo que hay que definir conceptos, por ejemplo, ¿Cuál es el estado "natural"? (que indica el concepto arriba mencionado) ¿Lo normal es lo común? ¿Qué define lo común?, ¿Qué es común?, y si ese concepto de lo normal de los diccionarios ¿Se refiere a cosas o a personas?
No me parece que lo común sea lo mas normal, tengo esperanzas en que lo mas normal sea ser uno mismo, pero ¿Cuál es el límite entre lo normal y lo anormal? y ¿Hasta dónde es posible ser normal?
Joder, me siento mas anormal que nunca...
martes, 13 de enero de 2009
La nieve cortó el camino
La nieve cortó el camino
tú no estabas
me senté con las piernas cruzadas
contemplando tu rostro
con los ojos cerrados.
No pasaban barcos ni volaban aviones
tú no estabas
yo permanecía apoyado en la pared
hablando y hablando
sin abrir la boca.
Tú no estabas
mis manos te acariciaban
yo me tapaba la cara con las manos.
Nâzim Hikmet
tú no estabas
me senté con las piernas cruzadas
contemplando tu rostro
con los ojos cerrados.
No pasaban barcos ni volaban aviones
tú no estabas
yo permanecía apoyado en la pared
hablando y hablando
sin abrir la boca.
Tú no estabas
mis manos te acariciaban
yo me tapaba la cara con las manos.
Nâzim Hikmet
sábado, 10 de enero de 2009
Felicidad
Pedí a los profesores
que enseñan el sentido de la vida
que me dijeran qué es la felicidad.
Fui a ver a los afamados ejecutivos
que comandan el trabajo
de miles de hombres.
Todos menearon la cabeza
y me sonrieron como si yo
tratase de engatusarlos.
Y un domingo por la tarde
fui a pasear por la orilla
del río Desplaines.
Y vi a un grupo de húngaros bajo los árboles,
con sus mujeres y sus hijos,
un barril de cerveza y un acordeón.
Carl Sandburg
(Como no soy húngaro yo estaría con todo lo que dice Carl, pero con mi guitarra)
que enseñan el sentido de la vida
que me dijeran qué es la felicidad.
Fui a ver a los afamados ejecutivos
que comandan el trabajo
de miles de hombres.
Todos menearon la cabeza
y me sonrieron como si yo
tratase de engatusarlos.
Y un domingo por la tarde
fui a pasear por la orilla
del río Desplaines.
Y vi a un grupo de húngaros bajo los árboles,
con sus mujeres y sus hijos,
un barril de cerveza y un acordeón.
Carl Sandburg
(Como no soy húngaro yo estaría con todo lo que dice Carl, pero con mi guitarra)
viernes, 9 de enero de 2009
Al partir
Al partir, me quedan cosas que acabar,
al partir.
Salvé la gacela de la mano del cazador,
pero siguió desvanecida, sin recobrar el sentido.
Cogí la naranja de la rama,
pero no pude despojarla de su corteza.
Me reuní con las estrellas,
pero no pude contarlas.
Saqué agua del pozo,
pero no pude servirla en los vasos.
Coloqué las rosas en la bandeja,
pero no pude tallar las tazas de piedra.
No sacié mis amores.
Al partir, me quedan cosas que acabar,
al partir.
Nâzim Hikmet
al partir.
Salvé la gacela de la mano del cazador,
pero siguió desvanecida, sin recobrar el sentido.
Cogí la naranja de la rama,
pero no pude despojarla de su corteza.
Me reuní con las estrellas,
pero no pude contarlas.
Saqué agua del pozo,
pero no pude servirla en los vasos.
Coloqué las rosas en la bandeja,
pero no pude tallar las tazas de piedra.
No sacié mis amores.
Al partir, me quedan cosas que acabar,
al partir.
Nâzim Hikmet
jueves, 8 de enero de 2009
Arrullo
Suave la lluvia entre las hojas
es un rumor amado y lento,
y tú en mi pecho te abandonas
con silencioso encantamiento.
Se trenza el viento con la lluvia...
vibras... ¡Oh que blando momento
para morir con la dulzura
del agua que evapora el viento!
-¿Oyes la lluvia que solloza?
-¿Oyes el viento plañidero?
Herida mía dulce y honda,
sólo tú ignoras de qué muero.
Francis Carco
es un rumor amado y lento,
y tú en mi pecho te abandonas
con silencioso encantamiento.
Se trenza el viento con la lluvia...
vibras... ¡Oh que blando momento
para morir con la dulzura
del agua que evapora el viento!
-¿Oyes la lluvia que solloza?
-¿Oyes el viento plañidero?
Herida mía dulce y honda,
sólo tú ignoras de qué muero.
Francis Carco
miércoles, 7 de enero de 2009
El último trato
Una mañana iba yo por la pedregosa carretera,
cuando espada en mano, llegó el Rey en su carroza.
"¡Me vendo!", grité. el Rey me cogió de la mano y me dijo:
"Soy poderoso, puedo comprarte." Pero de nada le valió su poderío
y se volvió sin mí en su carroza.
Las casas estaban cerradas en el sol del mediodía
y yo vagaba por el callejón retorcido
cuando un viejo cargado con un saco de oro me salió al encuentro.
Dudó un momento, y me dijo: "Soy rico, puedo comprarte."
Una a una ponderó sus monedas. Pero yo le volví la espalda y me fui.
Anochecía y el seto del jardín estaba todo en flor.
Una muchacha gentil apareció delante de mí, y me dijo:
"Te compro con mi sonrisa." Pero su sonrisa palideció
y se borró en sus lágrimas. Y se volvió sola otra vez a la sombra.
El sol relucía en la arena y las olas del mar rompían caprichosamente.
Un niño estaba sentado en la playa jugando con las conchas.
Levantó la cabeza y, como si me conociera, me dijo:
"Puedo comprarte con nada." Desde que hice este trato jugando, soy libre.
Rabindranath Tagore
cuando espada en mano, llegó el Rey en su carroza.
"¡Me vendo!", grité. el Rey me cogió de la mano y me dijo:
"Soy poderoso, puedo comprarte." Pero de nada le valió su poderío
y se volvió sin mí en su carroza.
Las casas estaban cerradas en el sol del mediodía
y yo vagaba por el callejón retorcido
cuando un viejo cargado con un saco de oro me salió al encuentro.
Dudó un momento, y me dijo: "Soy rico, puedo comprarte."
Una a una ponderó sus monedas. Pero yo le volví la espalda y me fui.
Anochecía y el seto del jardín estaba todo en flor.
Una muchacha gentil apareció delante de mí, y me dijo:
"Te compro con mi sonrisa." Pero su sonrisa palideció
y se borró en sus lágrimas. Y se volvió sola otra vez a la sombra.
El sol relucía en la arena y las olas del mar rompían caprichosamente.
Un niño estaba sentado en la playa jugando con las conchas.
Levantó la cabeza y, como si me conociera, me dijo:
"Puedo comprarte con nada." Desde que hice este trato jugando, soy libre.
Rabindranath Tagore
martes, 6 de enero de 2009
Apocalyptica - Repressed
I travelled the way that you showed me
Left all my sorrow behind
I’m living with rules you once told me
Expecting myself to be fine
So why the fuck am I lonely
There’s no one inside I can call
To give up the fight is a warning
The one day to stand you will fall
I left my sorrow behind
(Você / Precisa / direcção)
Warning not to give up the fight
(Me diga a verdade / Protecção)
Your words that gave me direction
Helped me turn into what I thought I wanted
Fists that gave me protection
Helped me deal with you
So for now our days are through
Nothing left
Nothing rests
Nothing grasp
You declared what your faith is
But you still have the fear
The way you’ve left your life open
Will no bring your destiny here
Do I continue my journey
Confusion is wrapped in my mind
So when your gone with your martyr
You can continue your lies
(Você / Precisa / direcção)
(Me diga a verdade / Protecção)
Your words that gave me direction (Protecção)
Helped me turn into what I thought I wanted (Me diga a verdade)
Fists that gave me protection (Você / Precisa / direcção)
Helped me deal with you (Precisa / Protecao)
So for now our days are through (Me diga a verdade)
I left my sorrow behind
I left my sorrow behind
Warning not to give up the fight
Warning not to give up the fight
You declared what your faith is
But you still have the fear
I will continue my journey
I need your lies nomore
Your words that gave me direction (Protecao)
Helped me turn into what I thought I wanted (Me diga a verdade)
Fists that gave me protection (Você / Precisa / direcção)
Helped me deal with you (Voce / Precisa / Protecao)
So for now our days are through (Me diga a verdade)
(direcção / Protecção)
So for now our days are through
(Me diga a verdade / Direcção / Protecção)
So for now our days are through
Nothing left
Nothing rests
Nothing grasp
Never underrate the man with nothing left inside
Never underrate the man with nothing left inside
lunes, 5 de enero de 2009
Plenitud
sábado, 3 de enero de 2009
Angeles
Etimología
La palabra española "ángel" procede del latín angelus, que a su vez deriva del griego ἄγγελος ángelos, "mensajero". La palabra hebrea más parecida es מלאך mal'ach, que tiene el mismo significado. El término "ángel" también se usa en la Biblia para las siguientes tres palabras hebreas:
אביר abbir (literalmente "poderoso"), Salmo (78:25).
אלהים Elohim ("dioses" o plural mayéstático de Dios) Salmo (8:5).
שנאן shin'an, en Salmo (68:17).
Ángeles en el Judaísmo
Aunque los israelitas eran un pueblo monoteísta, vivían rodeados de otros pueblos de tradición politeísta cuyas creencias sin duda ejercieron un fuerte influjo sobre los judíos. Resultó entonces muy útil convertir a cualquier ser “divino” en un servidor del único dios que adoraban, formando así una “corte celestial”, similar a la de los reyes de esa época. Posiblemente por influencia mesopotámica (los israelitas fueron llevados cautivos a Babilonia desde el año 597 a. C. hasta el 538 a.C.), se empezó a representar a estos ángeles con alas. El influjo de la religión mazdeísta, basada en los principios del mal y el bien como explicación de todas las cosas, también contribuyó sin duda a configurar los ángeles como parte “del bien”, mientras que las potencias malignas encajaron de modo natural como “ángeles malos” (o ángeles caídos) y por tanto servidores del mal.
Desde muy pronto, a los ángeles se les atribuyó el papel de intermediarios entre la divinidad y los seres humanos, posiblemente porque su aspecto de “hombres con alas” parecía apropiado para moverse tanto en el ámbito divino como en el humano. Así, ya para los persas un ángel fue el encargado de revelar “la verdad” a Zoroastro. Este modelo se va a repetir una y otra vez en el judaísmo (por ejemplo el ángel Gabriel con Abraham), el Cristianismo (ángel Gabriel con la Virgen María) y el islam (ángel Gabriel con Mahoma).
A lo largo de los siglos, los ángeles judíos van evolucionando, en un principio se los menciona como seres tan parecidos a varones humanos que podían ser confundidos con ellos, para ir luego paulatinamente tornándose más espirituales y cumpliendo funciones más especializadas (ángeles que solo sirven a la divinidad, ángeles mensajeros, ángeles que castigan, etc).
Ángeles en el Cristianismo
Los ángeles en la tradición cristiana parten de lo que se ha dicho sobre ellos en la religión judía; por tanto, son seres creados por Dios para su servicio, que actúan como enviados o mensajeros para los hombres.
La postura oficial de la Iglesia Católica se fija en los concilios de Roma del año 745 y de Aquisgrán del 789, los cuales rechazaron el uso de nombres de ángeles, salvo aquellos citados en la Biblia: Miguel, Gabriel y Rafael. La Iglesia ortodoxa griega y la Iglesia ortodoxa copta reverencian, no obstante, también a Uriel. Pero además existen muchas otras fuentes documentales y tradicionales que se refieren a otros ángeles, como Baraquiel, Alamiel, Letiel o Laeiel. En el Apocalipsis Nova de Amadeo de Portugal se mencionan a Uriel, Sealtiel, Jehudiel y Barachiel.
Jerarquía
De acuerdo a los teólogos cristianos de la Edad Media, los ángeles están organizados en varias órdenes, o coros, angelicales. La clasificación más influyente fue creada por un autor desconocido cuyas obras nos han llegado atribuidas a Dionisio Areopagita, por lo que es conocido como Pseudo-Dionisio Areopagita, y expuso su doctrina angelológica en su libro La Jerarquía Celeste. Según esta obra, los nueve coros angélicos, agrupados en tres grupos, son serafines, querubines y tronos (primer grupo); dominaciones, virtudes y potestades (segundo grupo) y principados, arcángeles y ángeles (tercer grupo).
Los serafines están en la cima de la jerarquía y rodean el trono de Dios; son de color rojo y su atributo es el fuego. Los querubines simbolizan la sabiduría divina y son de color azul y oro. Los tronos representan la justicia divina y llevan toga y bastón de mando. El segundo grupo es responsable de los elementos naturales y de los cuerpos celestes. Las dominaciones llevan corona y cetro. Las postestades ordenan las operaciones que los espíritus superiores ejecutan en los inferiores; también llevan corona y cetro. Las virtudes se refieren a la Pasión de Cristo y llevan a veces flores o símbolos de María. El tercer grupo establece la relación con la humanidad. Los principados protegen a las naciones, los arcángeles son mensajeros de Dios y los ángeles protegen a los seres humanos.
Iconografía
Una diferencia notable con las otras religiones, es que en el catolicismo se dispone de un registro abundante de cómo se ha imaginado a los ángeles a través del tiempo. Generalmente se trata casi siempre de niños, jóvenes varones, o seres asexuados. En la Edad Media, los ángeles no eran representados de forma aislada, a excepción de algunas obras de la pintura flamenca, italiana y española en las que aparece San Miguel Arcángel como "Juez de las Almas". Es en el Renacimiento cuando los ángeles comienzan a ser pintados individualmente, práctica que se extiende durante el Barroco.
La escuela sevillana de pintura, en especial Zurbarán y sus discípulos, contribuyó también de forma importante a la iconografía de los ángeles. Cuando los conquistadores españoles impusieron la religión católica a los habitantes de América, éstos encontraron en los ángeles unos sustitutos ideales para sus antiguos dioses, por lo que su culto llegó a ser muy popular, surgiendo, ya durante el Barroco, los ángeles arcabuceros, representados como soldados de lujosas ropas holgadas.
El sexo de los ángeles
Aunque la tradicción los suele representar como varones, los ángeles no tendrían sexo y su género ha sido discutido en múltiples Concilios. Sin embargo, en algunos pasajes de la Biblia se declara su carácter masculino:
En el Génesis (19:2), Lot dice a los dos ángeles que llegan a Sodoma “Mirad, señores; os ruego que vengáis a la casa de vuestro siervo, para pernoctar en ella y lavaros los pies. Cuando os levantéis por la mañana, seguiréis vuestro camino”. El texto original hebreo utiliza adonai, "señor".
En el Libro de los Jueces (13:6), un ángel anuncia el nacimiento de su hijo a la madre Sansón: “Ha venido a mí un hombre de Dios. Tenía el aspecto de un ángel de Dios muy temible. Yo no le pregunté de dónde venía ni me dio a conocer su nombre”. El original hebreo utiliza el masculino 'iysh, "hombre, varón".
En los Hechos de los apóstoles (12:7) se produce la liberación de Pedro de su prisión: “Un ángel del Señor se presentó, y el calabozo se iluminó; y golpeando a Pedro en el costado, le despertó, diciendo: Levántate pronto; y se cayeron las cadenas de sus manos”. El texto original griego utiliza aggelos, "mensajero", masculino.
En el Apocalipsis (15:6) se lee “y salieron del templo los siete ángeles que tenían las siete plagas, vestidos de lino puro, brillante, y ceñidos los pechos con cinturones de oro”. El original griego también utiliza aggelos.
Ángeles en el Islam
Adán y Eva rodeados de ángeles en una miniatura persa de hacia 1550.Como religión emparentada estrechamente con el cristianismo y el judaísmo, en el Islam también existe la creencia en los ángeles, que en lengua árabe reciben el nombre de ملاك , malāk (plural ملائكة , malā'ika), de la misma raíz que el hebreo מלאך , malākh o malāj.
La creencia en los ángeles es central en el islam, empezando por el que, según la tradición, fue el jefe de los ángeles, Yibril o Yibrail (Gabriel), quien se dirigió a Mahoma en nombre de Dios para dictarle su revelación, el Corán.
El Islam concibe a los ángeles como seres creados de luz y dedicados totalmente al servicio de Dios, por cuyo mandato realizan determinadas tareas, como introducir el alma en el cuerpo de los neonatos, recoger el alma de los que mueren, registrar determinados hechos de la vida o servir de mensajeros divinos. Como ejemplo de esto último, además de la revelación hecha a Mahoma y a los profetas anteriores por Gabriel, está la anunciación a Maryam Bint Dawud (la virgen María).
Según el Islam, los ángeles, al contrario que los seres humanos, no comen ni procrean, no están dotados de libre albedrío y no pueden cometer pecados. Pueden adoptar apariencia humana y generalmente se les describe como seres extraordinariamente bellos que poseen varios pares de alas, aunque pictóricamente se les suele representar con un único par.
La figura del demonio en el Islam que tendría en su forma auténtica seiscientas alas, aparece asociada a la de los genios, seres creados de fuego y no de luz, por lo que no es considerado como un angel caído.
El Islam no establece entre los ángeles jerarquías complejas como las que crearon los teólogos cristianos medievales. Hay cuatro ángeles que se consideran principales, Yibril, Azra'il, Mika'il e Israfil, todos ellos mencionados en el Corán salvo Azra'il, y otros ángeles menores. Yibril o Yibra'il (Gabriel) es el jefe de todos los ángeles y es también el mensajero de Dios para todos los profetas. Es el instrumento de la revelación no solo del Corán sino también de los Evangelios, los Salmos y la Torá a sus destinatarios respectivos. Azra'il (Azrael) es el ángel de la muerte, encargado de que el alma humana abandone el cuerpo. La separación de alma y cuerpo puede hacerse de un modo más dulce o más violento dependiendo del comportamiento que haya tenido la persona en vida. Mika'il (Miguel) es el encargado de la lluvia y del trueno. Por último, Israfil (Rafael) es el encargado de dar la señal de la llegada del Día del Juicio, con la «trompeta de la verdad», y de sembrar las almas en sus cuerpos antes de nacer.
Entre los otros ángeles presentes en las creencias islámicas, podemos encontrar a Rakīb y Athīd, que registran las buenas y malas acciones realizadas por las personas a lo largo de la vida; Nakīr y Munkar, que interrogan a la persona que acaba de morir acerca de su fe; Radwān, el ángel responsable del Paraíso, así como Mālik lo es del Infierno; Hārūt y Mārūt, dos angeles de la magia; y Charrsk, conocido como ángel de luz y oscuridad a cuyo cargo están diecinueve ángeles que administran los castigos a los condenados al fuego. Otros ocho ángeles sostienen el trono de Dios.
La palabra española "ángel" procede del latín angelus, que a su vez deriva del griego ἄγγελος ángelos, "mensajero". La palabra hebrea más parecida es מלאך mal'ach, que tiene el mismo significado. El término "ángel" también se usa en la Biblia para las siguientes tres palabras hebreas:
אביר abbir (literalmente "poderoso"), Salmo (78:25).
אלהים Elohim ("dioses" o plural mayéstático de Dios) Salmo (8:5).
שנאן shin'an, en Salmo (68:17).
Ángeles en el Judaísmo
Aunque los israelitas eran un pueblo monoteísta, vivían rodeados de otros pueblos de tradición politeísta cuyas creencias sin duda ejercieron un fuerte influjo sobre los judíos. Resultó entonces muy útil convertir a cualquier ser “divino” en un servidor del único dios que adoraban, formando así una “corte celestial”, similar a la de los reyes de esa época. Posiblemente por influencia mesopotámica (los israelitas fueron llevados cautivos a Babilonia desde el año 597 a. C. hasta el 538 a.C.), se empezó a representar a estos ángeles con alas. El influjo de la religión mazdeísta, basada en los principios del mal y el bien como explicación de todas las cosas, también contribuyó sin duda a configurar los ángeles como parte “del bien”, mientras que las potencias malignas encajaron de modo natural como “ángeles malos” (o ángeles caídos) y por tanto servidores del mal.
Desde muy pronto, a los ángeles se les atribuyó el papel de intermediarios entre la divinidad y los seres humanos, posiblemente porque su aspecto de “hombres con alas” parecía apropiado para moverse tanto en el ámbito divino como en el humano. Así, ya para los persas un ángel fue el encargado de revelar “la verdad” a Zoroastro. Este modelo se va a repetir una y otra vez en el judaísmo (por ejemplo el ángel Gabriel con Abraham), el Cristianismo (ángel Gabriel con la Virgen María) y el islam (ángel Gabriel con Mahoma).
A lo largo de los siglos, los ángeles judíos van evolucionando, en un principio se los menciona como seres tan parecidos a varones humanos que podían ser confundidos con ellos, para ir luego paulatinamente tornándose más espirituales y cumpliendo funciones más especializadas (ángeles que solo sirven a la divinidad, ángeles mensajeros, ángeles que castigan, etc).
Ángeles en el Cristianismo
Los ángeles en la tradición cristiana parten de lo que se ha dicho sobre ellos en la religión judía; por tanto, son seres creados por Dios para su servicio, que actúan como enviados o mensajeros para los hombres.
La postura oficial de la Iglesia Católica se fija en los concilios de Roma del año 745 y de Aquisgrán del 789, los cuales rechazaron el uso de nombres de ángeles, salvo aquellos citados en la Biblia: Miguel, Gabriel y Rafael. La Iglesia ortodoxa griega y la Iglesia ortodoxa copta reverencian, no obstante, también a Uriel. Pero además existen muchas otras fuentes documentales y tradicionales que se refieren a otros ángeles, como Baraquiel, Alamiel, Letiel o Laeiel. En el Apocalipsis Nova de Amadeo de Portugal se mencionan a Uriel, Sealtiel, Jehudiel y Barachiel.
Jerarquía
De acuerdo a los teólogos cristianos de la Edad Media, los ángeles están organizados en varias órdenes, o coros, angelicales. La clasificación más influyente fue creada por un autor desconocido cuyas obras nos han llegado atribuidas a Dionisio Areopagita, por lo que es conocido como Pseudo-Dionisio Areopagita, y expuso su doctrina angelológica en su libro La Jerarquía Celeste. Según esta obra, los nueve coros angélicos, agrupados en tres grupos, son serafines, querubines y tronos (primer grupo); dominaciones, virtudes y potestades (segundo grupo) y principados, arcángeles y ángeles (tercer grupo).
Los serafines están en la cima de la jerarquía y rodean el trono de Dios; son de color rojo y su atributo es el fuego. Los querubines simbolizan la sabiduría divina y son de color azul y oro. Los tronos representan la justicia divina y llevan toga y bastón de mando. El segundo grupo es responsable de los elementos naturales y de los cuerpos celestes. Las dominaciones llevan corona y cetro. Las postestades ordenan las operaciones que los espíritus superiores ejecutan en los inferiores; también llevan corona y cetro. Las virtudes se refieren a la Pasión de Cristo y llevan a veces flores o símbolos de María. El tercer grupo establece la relación con la humanidad. Los principados protegen a las naciones, los arcángeles son mensajeros de Dios y los ángeles protegen a los seres humanos.
Iconografía
Una diferencia notable con las otras religiones, es que en el catolicismo se dispone de un registro abundante de cómo se ha imaginado a los ángeles a través del tiempo. Generalmente se trata casi siempre de niños, jóvenes varones, o seres asexuados. En la Edad Media, los ángeles no eran representados de forma aislada, a excepción de algunas obras de la pintura flamenca, italiana y española en las que aparece San Miguel Arcángel como "Juez de las Almas". Es en el Renacimiento cuando los ángeles comienzan a ser pintados individualmente, práctica que se extiende durante el Barroco.
La escuela sevillana de pintura, en especial Zurbarán y sus discípulos, contribuyó también de forma importante a la iconografía de los ángeles. Cuando los conquistadores españoles impusieron la religión católica a los habitantes de América, éstos encontraron en los ángeles unos sustitutos ideales para sus antiguos dioses, por lo que su culto llegó a ser muy popular, surgiendo, ya durante el Barroco, los ángeles arcabuceros, representados como soldados de lujosas ropas holgadas.
El sexo de los ángeles
Aunque la tradicción los suele representar como varones, los ángeles no tendrían sexo y su género ha sido discutido en múltiples Concilios. Sin embargo, en algunos pasajes de la Biblia se declara su carácter masculino:
En el Génesis (19:2), Lot dice a los dos ángeles que llegan a Sodoma “Mirad, señores; os ruego que vengáis a la casa de vuestro siervo, para pernoctar en ella y lavaros los pies. Cuando os levantéis por la mañana, seguiréis vuestro camino”. El texto original hebreo utiliza adonai, "señor".
En el Libro de los Jueces (13:6), un ángel anuncia el nacimiento de su hijo a la madre Sansón: “Ha venido a mí un hombre de Dios. Tenía el aspecto de un ángel de Dios muy temible. Yo no le pregunté de dónde venía ni me dio a conocer su nombre”. El original hebreo utiliza el masculino 'iysh, "hombre, varón".
En los Hechos de los apóstoles (12:7) se produce la liberación de Pedro de su prisión: “Un ángel del Señor se presentó, y el calabozo se iluminó; y golpeando a Pedro en el costado, le despertó, diciendo: Levántate pronto; y se cayeron las cadenas de sus manos”. El texto original griego utiliza aggelos, "mensajero", masculino.
En el Apocalipsis (15:6) se lee “y salieron del templo los siete ángeles que tenían las siete plagas, vestidos de lino puro, brillante, y ceñidos los pechos con cinturones de oro”. El original griego también utiliza aggelos.
Ángeles en el Islam
Adán y Eva rodeados de ángeles en una miniatura persa de hacia 1550.Como religión emparentada estrechamente con el cristianismo y el judaísmo, en el Islam también existe la creencia en los ángeles, que en lengua árabe reciben el nombre de ملاك , malāk (plural ملائكة , malā'ika), de la misma raíz que el hebreo מלאך , malākh o malāj.
La creencia en los ángeles es central en el islam, empezando por el que, según la tradición, fue el jefe de los ángeles, Yibril o Yibrail (Gabriel), quien se dirigió a Mahoma en nombre de Dios para dictarle su revelación, el Corán.
El Islam concibe a los ángeles como seres creados de luz y dedicados totalmente al servicio de Dios, por cuyo mandato realizan determinadas tareas, como introducir el alma en el cuerpo de los neonatos, recoger el alma de los que mueren, registrar determinados hechos de la vida o servir de mensajeros divinos. Como ejemplo de esto último, además de la revelación hecha a Mahoma y a los profetas anteriores por Gabriel, está la anunciación a Maryam Bint Dawud (la virgen María).
Según el Islam, los ángeles, al contrario que los seres humanos, no comen ni procrean, no están dotados de libre albedrío y no pueden cometer pecados. Pueden adoptar apariencia humana y generalmente se les describe como seres extraordinariamente bellos que poseen varios pares de alas, aunque pictóricamente se les suele representar con un único par.
La figura del demonio en el Islam que tendría en su forma auténtica seiscientas alas, aparece asociada a la de los genios, seres creados de fuego y no de luz, por lo que no es considerado como un angel caído.
El Islam no establece entre los ángeles jerarquías complejas como las que crearon los teólogos cristianos medievales. Hay cuatro ángeles que se consideran principales, Yibril, Azra'il, Mika'il e Israfil, todos ellos mencionados en el Corán salvo Azra'il, y otros ángeles menores. Yibril o Yibra'il (Gabriel) es el jefe de todos los ángeles y es también el mensajero de Dios para todos los profetas. Es el instrumento de la revelación no solo del Corán sino también de los Evangelios, los Salmos y la Torá a sus destinatarios respectivos. Azra'il (Azrael) es el ángel de la muerte, encargado de que el alma humana abandone el cuerpo. La separación de alma y cuerpo puede hacerse de un modo más dulce o más violento dependiendo del comportamiento que haya tenido la persona en vida. Mika'il (Miguel) es el encargado de la lluvia y del trueno. Por último, Israfil (Rafael) es el encargado de dar la señal de la llegada del Día del Juicio, con la «trompeta de la verdad», y de sembrar las almas en sus cuerpos antes de nacer.
Entre los otros ángeles presentes en las creencias islámicas, podemos encontrar a Rakīb y Athīd, que registran las buenas y malas acciones realizadas por las personas a lo largo de la vida; Nakīr y Munkar, que interrogan a la persona que acaba de morir acerca de su fe; Radwān, el ángel responsable del Paraíso, así como Mālik lo es del Infierno; Hārūt y Mārūt, dos angeles de la magia; y Charrsk, conocido como ángel de luz y oscuridad a cuyo cargo están diecinueve ángeles que administran los castigos a los condenados al fuego. Otros ocho ángeles sostienen el trono de Dios.
jueves, 1 de enero de 2009
Año nuevo
Otro año que se va, mañana será un nuevo año,
¿algo habrá de diferente?
Ya pasé muchos años nuevos
y cada año tiene casi mas de lo mismo,
no es una visión pesimista,
solo que así es,
ojala que a partir de mañana Yo sea un poco diferente,
que me preocupe un poco mas de mis amigos,
de las personas que quiero,
de las que extraño
y de las que tengo cerca.
Cada año nuevo trae cosas nuevas,
solo que a veces estamos tan ocupados
en las cosas que siempre hemos hecho,
que parecen igual.
Cada año trae cosas nuevas,
pero nunca me trae de regreso a Ti.
Eso es lo que mañana sucedera de nuevo.
¿algo habrá de diferente?
Ya pasé muchos años nuevos
y cada año tiene casi mas de lo mismo,
no es una visión pesimista,
solo que así es,
ojala que a partir de mañana Yo sea un poco diferente,
que me preocupe un poco mas de mis amigos,
de las personas que quiero,
de las que extraño
y de las que tengo cerca.
Cada año nuevo trae cosas nuevas,
solo que a veces estamos tan ocupados
en las cosas que siempre hemos hecho,
que parecen igual.
Cada año trae cosas nuevas,
pero nunca me trae de regreso a Ti.
Eso es lo que mañana sucedera de nuevo.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)